Milesa
Iluminadora de Caminos | ||
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| Clase: Mago Raza: Elfo Género: Femenino Nacimiento: 1539 Fallecimiento: - Lealtad: Armada Imperial Relacionados: Ehide | |
Descripción física y personalidad
Milesa es una elfa de cabello azulado y lacio. Su rostro tiene rasgos finos y aristocráticos, mientras que su mirada refleja la tenacidad y valentía que la caracterizan. Aunque proviene de una familia oriunda de Banderbill, dedicada a los negocios y no al combate, Milesa siempre sintió que su destino debía ser forjado en el campo de batalla.
Su empatía hacia los demás es una de sus virtudes más destacadas, y, pese a su origen, se caracteriza por un trato amable hacia quienes la rodean, independientemente de su estatus. Milesa no tolera la injusticia y no duda en expresar su opinión, incluso si eso la pone en desacuerdo con sus superiores.
Inicios del personaje
Desde sus primeros años, la pequeña elfa fue educada en la elegancia y las artes diplomáticas de Banderbill, donde su familia ejercía una gran influencia en los consejos imperiales. Su padre proviene de una familia que posee una gran flota de barcos pesqueros, la cual comercializa y provee de alimentos a todo el continente de Oderon. Su madre, por otra parte, pertenece a una familia de clase media de Banderbill.
A diferencia de sus padres, que preferían los negocios y las reuniones, Milesa siempre se sintió intrigada por las historias de aquellos que arriesgaban sus vidas para proteger al Imperio y a su gente. Su oportunidad de acercarse a la vida militar llegó a los diez años, durante una visita familiar a la ciudad de Nix. Sus padres se encontraban en una reunión de negocios, mientras que Milesa paseaba por los alrededores de Nix. En un abrir y cerrar de ojos, se encontró rodeada por una horda de orcos que merodeaban la ciudad. Al verse en esta situación, comenzó a gritar desaforadamente. Por suerte, unos guardias que patrullaban la zona lograron escuchar su grito de ayuda. Al ver a los guardias de la Armada Imperial enfrentarse con valor a los orcos, algo despertó en ella y decidió que, algún día, se entrenaría para ayudar a los ciudadanos, al igual que aquellos soldados del imperio hicieron ese día.
A pesar de las objeciones de su familia, ya que sus padres, al ser personas de negocios, no estaban contentos con esta decisión, Milesa, con su personalidad rebelde, logró convencerlos. Comenzó a practicar para que, al llegar a la mayoría de edad, pudiera inscribirse en la Armada Imperial. Al no contar con experiencia previa en combate los primeros días de entrenamiento fueron duros para ella. Sus mentores, quienes fueron contratados por sus padres, la consideraban débil y carente de habilidades prácticas. Sin embargo, su herencia élfica le otorgaba una conexión natural con la magia, un talento que decidió perfeccionar día tras día. Entrenando de sol a sol, su progreso fue notable. En poco tiempo, la maga comenzó a ganarse el respeto de quienes antes la subestimaban, demostrando que sus méritos eran propios y que su compromiso con la Armada iba mucho más allá de su linaje.
Historia intermedia
Con varios años de experiencia, Milesa por fin se enlistó en la Armada Imperial, donde fue enviada a una misión de reconocimiento en una mina en el norte helado, en las cercanías de Tundra Tiama. Allí conoció a Ehide, una paladín destacada por su fuerza y resistencia o almenos eso se rumoreaba entre los novatos. Sin embargo, la misión resultó ser mucho más peligrosa de lo que habían anticipado. Apenas llegaron a las vastas y frías tierras de Annkör, fueron emboscadas por criaturas salvajes como huargos, lobos y un temible gólem de hielo. Aunque intentaron luchar con valor, pronto se dieron cuenta de que estaban en una situación desesperada.
Mientras Milesa conjuraba poderosos hechizos ígneos para mantener a las criaturas a raya, Ehide se colocó en primera línea, usando su fuerza y resistencia para soportar los golpes de los atacantes. A pesar de sus esfuerzos, las criaturas seguían avanzando, y ambas se encontraban cada vez más superadas. En un acto de valentía, Ehide cubrió a su compañera para darle tiempo suficiente de conjurar el hechizo “RAX IN ZAR” , con la que generó una bruma de fuego abrasiva, que finalmente les permitió abrirse paso entre los enemigos y escapar. La experiencia dejó a ambas agotadas y al borde de sus límites, pero lograron regresar a la capital con vida.
Al comunicar el fracaso de la misión, lejos de recibir apoyo o comprensión, fueron recibidas con acusaciones y reproches por parte de sus superiores, quienes las culparon de la falta de éxito en la misión. Este trato injusto encendió en Milesa una profunda indignación. Sabiendo que tanto ella como Ehide habían hecho todo lo posible en esa situación, eso provocó que alzara la voz en defensa de ambas, cuestionando la decisión de los generales de enviar a dos soldados a una misión de tan alto nivel sin el apoyo necesario. Su postura desafiante le ganó algunas miradas de desaprobación en la jerarquía militar, pero también demostró su integridad y su compromiso con la justicia y el bienestar de sus compañeros.
Lejos de ser algo malo, como “castigo” a la joven elfa se le asigno tareas menos valoradas ,como recibir y acompañar a los nuevos reclutas. Aunque algunos en su entorno lo veían como una humillación, esto le inspiró la idea de, junto a Ehide con la que compartían pensamientos, crear una nueva organización con sus ideales. Tras la dura experiencia en el norte y el castigo puesto por sus superiores, Milesa y Ehide decidieron empezar con esta idea de la nueva organización donde los novatos pudieran entrenarse responsablemente y ganarse un lugar en sus filas
Presente, aspiraciones y futuro
En el presente, Milesa y ehide fundaron la organización “UKF”, comprometida con la defensa del Imperio de manera justa y organizada, enfocada en la protección de los más débiles y en promover valores de honor, compañerismo y responsabilidad dentro de las filas imperiales.
Actualmente, Milesa reside en Banderbill, donde se ha convertido en una figura respetada y admirada entre los jóvenes aspirantes a la Armada. Con una reputación de valentía y firmeza, dedica su tiempo a entrenar y guiar a los nuevos reclutas, transmitiéndoles tanto sus conocimientos en magia como la importancia del honor, el compañerismo y la responsabilidad como soldados de la Armada Imperial. Por esto mismo, se la conoce como la “Iluminadora de Caminos”.
La entonces líder élfica de esta nueva agrupación aspira ver un Imperio más fuerte, donde cada soldado tenga un propósito claro y las decisiones de los altos mandos se tomen con verdadera consideración por las vidas en juego. Junto a Ehide y la organización UKF, Milesa espera formar una nueva generación de soldados fuertes, responsables y listos para proteger al Imperio con los valores que ella tanto defiende.