Las Hordas del Caos son el ejército liderado por el Señor de la Oscuridad, mejor conocido como el Demonio o Mhorkvel. Quienes integran esta facción tienen como objetivos sembrar el caos, el odio y la putrefacción en las tierras de Imperium Classic. Estos soldados recorren el mundo buscando recolectar almas para unir sus fuerzas. Los podrás identificar dentro del juego con el color rojo en su nombre.

¿Crees que tu sed de extinguir a todo ser que respire cerca de ti, se saciará con esas débiles facciones? Aquí no existen las reglas, nosotros las creamos. Matamos a nuestro antojo, recaudamos almas para fortalecernos y ser temidos en el Infierno. El verdadero poder está aquí, perder es para débiles, vive o muere.

No pretendas seguir ideales, entonces crea los tuyos. En nuestras filas encontrarás el éxito, la reputación que se merecen aquellas personas dignas de temer, quienes siembran el caos y la destrucción en cada uno de sus pasos, llegando así a los oídos del mismísimo Mhorkvel. Entrega tú alma al Demonio, ¡únete a las Hordas del Caos!

No se sabe cuándo nació, ni dónde, lo que sí afirman sus esbirros más leales es que el Demonio, bajo el nombre de Mhorkvel, fue discípulo del Gran Hechicero Garveloth en el Inframundo hasta que se rebeló contra él, arrebatándole algunos de sus poderes.

Luego de su batalla, buscando lugar dónde establecerse, creó y lideró los primeros ejércitos orcos del Bosque Dorck contra las fuerzas del Imperio, declarando una guerra que todavía no ha visto un fin. Hoy sus huestes están compuestas por criminales, asesinos y maniáticos de todas las razas que solo desean ver la sangre roja de sus enemigos alimentar el suelo del mundo conocido.

Orac, su antigua fortaleza, ha sido destruida, y ahora el Demonio se ha establecido en el Infierno, donde prepara sus Hordas para un nuevo ataque, pronto el mundo volverá a sucumbir ante las llamas, la desesperación y el dolor… ya que el verdadero caos, solo trae la muerte…

En lo profundo de los territorios más oscuros y olvidados, entre las sombras que se esconden en los rincones del mundo, yace Khelem, una fortaleza envuelta en el caos y el misterio. Invadida por las implacables Hordas del Caos por pedido de su temido líder, Mhorkvel, lo cual les tomó poco tiempo convertirlo en un lugar donde la anarquía y la discordia reinan supremas.

En el corazón de Khelem se encuentra la entrada al Infierno, donde Mhorkvel ejerce su poder sin piedad alguna. Nadie sabe realmente de dónde proviene el Demonio ni cómo llegó al poder, pero su mera presencia inspira temor y reverencia entre sus seguidores. Se dice que posee poderes oscuros y antiguos, otorgados por entidades más allá de la comprensión humana.

Orac es una isla siniestra, nacida de la distorsión provocada por la conexión entre el plano real y el Infierno. Este terreno de pesadilla es un vórtice de energías caóticas, donde la realidad se retuerce y contorsiona bajo la influencia de fuerzas demoniacas.

En Orac se reúnen las más temibles y despiadadas tropas del caos. Es un lugar donde la luz del sol apenas se atreve a penetrar, y la atmósfera está cargada de un perpetuo crepúsculo rojizo. Las imponentes fortalezas de piedra negra y las murallas cicatrizadas por el fuego volcánico se erigen como monumentos a la maldad pura.